Cementerio de Sabadell (Barcelona)
El cementerio de Sabadell se emplaza en su ubicación actual desde el 1864, al otro lado del Río Ripoll y fuera del núcleo de la ciudad. Se inauguró el día 26 de junio a las llanuras de San Nicolás, allá el agua, como se decía para señalar al otro lado del río. Las malas condiciones del foso de Taulí, que hasta entonces era el cementerio, provocaron su traslado.
La iglesia data de 1891 y es obra de Miquel Pascual i Tintorer. Tiene planta de cruz griega y está cubierta con una cúpula sobre la que se encuentran esculturas del juicio final.
El cementerio de Sabadell es el que posee el contenido artístico más relevante de todo el Vallès. Posee desde el monumento funerario más sencillo hasta el mausoleo más rico y fastuoso. Casi todas las obras artísticamente destacables se encuentran en el antiguo solar. Se encuentran obras de arquitectos y escultores de reconocida valía. Entre los arquitectos: Arís, Josep A. Obradors, Subirachs, Casulleras, Balcells, Bracons, Vila Juanico. Además de los escultores que trabajaron los primeros años, hay obras de Sala Babot, Nebot, Viladomat Massanas, Enric Monjo, Vicens Moratonas, Jaume Morna, Juventeny, Franz Metzer (de Bohemia), Josep M. Brull, Camil Fábregas, Adolf Salanguera, esgrafiados de Maurí Espadaler, decoraciones abstractas Vila-Casas, el lapidario de Nicolás Molina y otros.